El cambio climático es cada vez más perceptible en las ciudades de Baviera. Los residentes sienten el aumento de las temperaturas, sobre todo en los meses de verano. Los investigadores prevén que el número de días de más de 25 grados podría duplicarse en el futuro. Las ciudades se están convirtiendo así en auténticas islas de calor, donde las temperaturas son significativamente más altas que en las zonas circundantes. Estas islas urbanas de calor suponen un reto cada vez mayor para urbanistas y residentes.
Las causas del calor urbano
Varios factores contribuyen al calentamiento de las ciudades. Las superficies de hormigón y asfalto almacenan el calor y sólo lo liberan lentamente, lo que significa que apenas hay refrigeración ni siquiera por la noche. El tráfico y otras fuentes artificiales de calor también contribuyen al calentamiento. Además, muchos barrios carecen de suficientes espacios verdes que puedan tener un efecto refrescante. Un ejemplo de ello es la Hofackerstrasse de Augsburgo, caracterizada por edificios de hormigón y coches aparcados, que se calienta considerablemente.
Los árboles como aire acondicionado natural
Plantar árboles es un método eficaz y probado para refrescar las ciudades. Los árboles no sólo dan sombra, sino que también enfrían el aire por evaporación. Un árbol grande puede evaporar entre 60 y 80 metros cúbicos de agua al año, lo que supone una reducción considerable de la temperatura. Por tanto, unos árboles sanos y bien regados son esenciales para regular el clima en las zonas urbanas.
Problemas y soluciones para la ecologización
Sin embargo, muchos árboles urbanos están sometidos a estrés porque el suelo que los rodea suele estar demasiado sellado. Esto significa que el agua no puede llegar a las raíces, lo que limita considerablemente la capacidad de evaporación de los árboles. Por eso, urbanistas como Andreas Hofmann, de Augsburgo, se centran en desprecintar zonas y crear más espacios verdes. La Rotkreuzplatz de Múnich demuestra el éxito de estas medidas: Aquí, 34 grandes árboles garantizan una temperatura más agradable que en las calles circundantes.
Retos y aceptación entre la población
Sin embargo, rediseñar los espacios urbanos en favor de más zonas verdes y menos superficies selladas no siempre es fácil. A menudo surgen conflictos con el uso de las plazas de aparcamiento y otras necesidades urbanas. Por eso es esencial una planificación a largo plazo, bien pensada y que cuente con la participación de los residentes. En Augsburgo, la Hofackerstrasse se está rediseñando como la llamada calle del clima, aunque también hay voces críticas. Por ello, los urbanistas deben encontrar siempre compromisos para satisfacer las distintas necesidades de los ciudadanos.
Conclusión
La lucha contra el calor urbano requiere soluciones innovadoras y sostenibles. El reverdecimiento de las ciudades y la reducción del sellado del suelo son medidas clave para mejorar el clima urbano. No se trata de una tarea exclusiva de los planificadores urbanos, sino que también requiere el compromiso y el apoyo de los ciudadanos. Porque solo juntos podremos hacer que nuestras ciudades sean más resistentes a los retos del cambio climático. Otro paso importante es mantener el calor fuera de los hogares. Para ello se recomiendan protecciones térmicas exteriores para las ventanas. Como la persiana enrollable exterior CLIP'N'SHADE: http://clipnshade.de/shop/clipnshade-aussenrollo/
Encontrará más información y datos detallados sobre los cambios climáticos en las ciudades en la página web del Servicio Meteorológico Alemán aquí.
Fuentes:
- Trümper, Arno. "Las ciudades de Baviera son cada vez más calurosas". BR24, 22 de julio de 2024.
- Focus nº 285, abril de 2020. "Espacios vitales sin barreras: la demanda aumenta bruscamente debido al envejecimiento - la promoción funciona". Investigación del KfW.
- Lienzo de tendencias del cuaderno de trabajo, 2022 "Glosario de tendencias".
